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Macroeconomía

Crecimiento: las previsiones del crecimiento español según la UE

Agosto 2019

El crecimiento de un país revela su situación económica. En el caso de España la Comisión Europea y otros organismos internacionales han evaluado la situación del país.

Tras la entrega del Programa de Estabilidad 2019-2020 del ejecutivo en funciones, la Comisión Europea ha ofrecido su visión de la evolución económica de España. Este organismo nos da algunas buenas noticias ya que, en su opinión, si bien el crecimiento será moderado, este debería mantenerse en una senda robusta.

Tal situación es debida a dos factores principales: el consumo privado y la balanza comercial, que mide exportaciones e importaciones. El consumo ha ido decreciendo con el paso de los meses, pero la contribución neta de las exportaciones ha bastado para compensar dicha caída. Esto debería contribuir a mantener el crecimiento del producto interior bruto en torno a un 2,1% o un 2,2% para 2019 según los expertos de la Comisión, cifra que ha sido revisada más recientemente al alza, con un 2.3%. Sin embargo, a pesar de este crecimiento, el Ejecutivo comunitario prevé un bajón hasta el 1.9% para 2020.

Otro factor que contrarresta la caída del consumo privado es la aparente recuperación de los hogares, como consecuencia de una creación de empleo que se mantiene a buen ritmo, del incremento de los salarios y el del propio salario mínimo. La unión de estos factores les brinda una mayor resistencia, aunque prefieran gastar menos. No obstante, con un 14 % de desempleo aún queda mucho camino que recorrer para llegar a los niveles anteriores a la crisis. 

Junto a la bajada del consumo privado, la reducción de las inversiones extranjeras también pasa factura, aunque también este factor se ve mitigado por las exportaciones. Al menos, la Comisión espera un efecto rebote en el ahorro de los hogares, que debería crecer en 2019 y mantenerse para 2020.

Volviendo al empleo, la productividad de los españoles debería crecer, pero de manera muy moderada, lo que mantendrá los costes laborales unitarios al alza a lo largo del presente año. Este es un problema, el de la productividad, con el que España lleva lidiando años y que no parece que termine de solucionarse del todo. Aun así, las previsiones siguen siendo halagüeñas y, con un 1.2%, deberían permitirnos crecer por encima de la media europea

Sin duda, estas son buenas noticias. Pese a que las familias reducen el gasto y la inversión extranjera disminuye, la balanza comercial y el aumento del ahorro juegan a favor de la evolución de la economía española. Esto lleva a pensar que, con políticas adecuadas, la anterior crisis debería dejar paso a un mayor optimismo entre la población, lo que, sin duda, servirá de revulsivo para la economía en su conjunto.


Conclusiones

Las previsiones actuales de la Comisión Europea respecto de la marcha de la economía española son positivas, aunque aún hay mucho espacio para la mejora. El crecimiento debería mantenerse a lo largo del año y reducirse en el siguiente, pero habrá que esperar a las nuevas previsiones para comprobar si estas se revisan al alza o a la baja.